La Semana Santa no es una conmemoración propia de los católicos. Por el contrario, otras religiones y creencias también la celebran, pero de manera diferente.
 Ilustración de Rev. Colombia, Ciencia y Tecnología |
Cuando el mundo cristiano celebra la Semana Santa, la comunidad judía conmemora la salida del pueblo de Israel de territorio Egipcio, de la mano de Moisés, dejando atrás siglos de esclavitud. Desde entonces, esta fecha se recuerda como la Pascua judía.
En Israel esta celebración dura exactamente ocho días, mientas que en las Diásporas, otros territorios donde se practica la religión judía, los principales días de celebración son los dos viernes y los dos sábados que comprende este periodo.
Los dos primeros días la familia se reúne a comer el Matzá, una galleta sin levadura que recuerda el Maná con el que se alimentaron los judíos en el desierto del Sinaí.
El viernes y sábado siguientes se realiza una cena llamada Hagadá, que recuerda la acción de Moisés al liberar a su pueblo.
Para los Testigos de Jehová
Para los testigos de Jehová la Semana Santa comienza el 14 de abril, o 14 de Nisán, y comprende desde la puesta de sol hasta la próxima.
De acuerdo con su tradición, la única acción que Jesús mandó a conmemorar en esta fecha es la última cena; por esto, la comunidad se reúne en el Salón del Reino para recordar esta acción, reflexionar sobre ella y el significado de la muerte y resurrección de Jesús, como rey mas no como Dios todopoderoso.
En esta ceremonia, al igual que lo hizo Jesús, se reparte el pan y el vino, pero no todos son elegidos de participar de esta cena, pues este honor depende de los méritos de cada persona.
Las Iglesias Bautista, Pentecostal y Cristiana, coinciden en afirmar que esta no es una fecha de culpas y arrepentimientos. Según estas comunidades la Semana Santa es un momento especial para recordar y reflexionar sobre el sacrificio y muerte de Jesús, y sobretodo su resurrección, pues ésta fue una victoria sobre la muerte y el pecado.
 Foto de Rev. Credencial |
A la par de la fe religiosa, la gente recurre a "ayuditas" extras para mejorar su vida, aprovechando la energía especial que parece surgir en la Semana Santa.
Por eso no es raro ver a mucha gente comprando riegos, sahumerios y baños, tanto para ellos mismos, como para sus casas y negocios, elaborados principalmente a base de yerbabuena, sábila, romero, quina, albahaca, citronela, sándalo, agua y alcohol.
De acuerdo con la creencia popular, estas preparaciones, aplicadas en jueves y viernes santos, alejan la envidia y los celos, razones por las que fue traicionado Jesús.
La tradición cuenta también que cuando los soldados llegaron por Jesús al huerto de Los Olivos, éste toco una mata de sábila para indicar que de ahí en adelante esa sería la contra para las malas influencias. Por eso, también es muy común que la gente compre y adorne sus casas y negocios con esta planta durante la Semana Santa.
Y los indígenas
Algunas comunidades indígenas del sur del país, celebran, durante el tiempo que comprende la Semana Santa, un ritual en que los protagonistas principales son el agua y el fuego.
Esta es una ceremonia muy parecida a la que se realiza en las iglesias católicas, el Sábado Santo. Aquí también el fuego y el agua representan la iluminación, una guía espiritual, un apoyo para encontrar la verdadera luz
A pesar de las diferentes formas de celebrar estas fechas, la Semana Santa se convierte en una excusa para reflexionar acerca de nosotros mismos y la esencia espiritual del universo.
Para mayor información acerca del tema tratado en este artículo, escríbanos a aupec@mafalda.univalle.edu.co
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