El nuevo instrumento de información permite a los maestros detectar algunos problemas de salud, que pueden interferir en el aprendizaje de los escolares y conocer las posibles causas del bajo rendimiento académico.
Foto de Aupec |
Programas de promoción de la salud para la población escolar y adolescente, pueden hacer uso de un novedoso sistema de información, se trata de la Evaluación Temprana Aplicada a Escolares para la Identificación de Condiciones de Riesgo para un Aprendizaje Saludable, Etapas. |
Los hospitales, centros y puestos de salud, están dejando de ser los únicos sitios en donde se atienden las necesidades de salud y bienestar de la población, específicamente la infantil.
Los programas de atención a la población en edad escolar que se desarrollan en todo el mundo, se inclinan por dar a la escuela un papel protagónico en el cuidado y mantenimiento de la salud de los escolares, creando proyectos, instrumentos y otras herramientas, para que puedan desarrollar efectivamente esta labor.
La Organización Mundial de la Salud, OMS, ha declarado a la población escolar y adolescente como prioritaria para la definición de programas de promoción de salud y con el apoyo de los gobiernos, avanza con éxitos en novedosos proyectos con comunidades escolares, en países como Costa Rica, Argentina y Chile.
Siguiendo esta línea, en la Universidad del Valle, en Cali, Colombia, un grupo de docentes y estudiantes de diferentes profesiones de la salud, ha diseñado un novedoso sistema de información para escolares, que, entre otras características, convierte al maestro en ficha clave para el cuidado de la salud de los alumnos.
Se trata de la Evaluación Temprana Aplicada a Escolares para la Identificación de Condiciones de Riesgo para un Aprendizaje Saludable, Etapas, diseñado por la fonoaudióloga Andrea Aguilar Crias, docente de la Escuela de Rehabilitación Humana de la Universidad del Valle, con la colaboración de los estudiantes de medicina Mónica Trujillo, Edgar Iván Trilleras y Victoria Valencia; la Coordinación de Ligia Elvira Viáfara Torres, Enfermera Especialista en Salud Familiar, de la Secretaría de Salud Pública Municipal de Cali y con la Consultoría de la Odontóloga Beatriz de Arizmendi, Magister en Epidemiología.
Maestros, vigilantes de salud
Etapas pretende que los maestros o los padres de niños y niñas en edad escolar, detecten, vigilen y controlen oportunamente, algunas condiciones de salud que ponen en riesgo el aprendizaje de los menores. "Se busca concientizar a los maestros de educación básica primaria para que asuman un papel activo como promotores de la salud y ejerzan liderazgo sobre este tema", explicó la autora del estudio.
Dichas condiciones son aquellos factores de índole social, biológico o psicológico, que impiden a los niños acceder a los conocimientos que se imparten en la escuela o fuera de ella, creándoles la necesidad de algún servicio de apoyo adicional, que les permitan nivelarse con sus compañeros.
El instrumento Etapas consta de 11 bloques de evaluación. El primero, evalúa cómo está el escolar en cuanto a su salud y a su aprendizaje; entre el segundo y el quinto, se indaga por la presencia de enfermedades como desnutrición, hipoglicemia y transtornos en la visión y audición; el sexto y el séptimo, acerca de las condiciones de vida y hábitos de higiene del escolar, parasitismo intestinal y piojos; en el octavo y noveno, sobre la salud mental, el lenguaje y las condiciones de vida intrafamiliar y social del escolar.
El bloque diez, pretende dar una mirada rápida al proceso de lectura y escritura y el 11, sobre necesidades educativas especiales y hace un llamado de alerta a la comunidad escolar sobre la presencia de menores con discapacidad y los cuidados que se les deben brindar.
El intrumento Etapas contiene además una hoja de "Identificación del Escolar" y un "Cuadro de Registro de Control del Aula", donde se consignan los problemas detectados, el plan de acción correctivo y los resultados.
Etapas en las escuelas
Foto de Aupec |
El proceso de enseñanza-aprendizaje de los escolares requiere de unas condiciones mínimas para llevarse a cabo satisfactoriamente, entre ellas, un adecuado estado de salud. |
Según la fonoaudióloga Andrea Aguilar, para la validación y prueba de Etapas se realizó un estudio descriptivo con 195 escolares, contando con el apoyo de estudiantes de Medicina, Bacteriología, Terapia Ocupacional, Odontología y Fonoaudiología.
Los maestros manifestaron que la mayor problemática en las escuelas eran las dificultades en el aprendizaje y las constantes enfermedades que presentaban niños y niñas.
Mediante Etapas, se encontró que el factor de riesgo de mayor incidencia son las dificultades en la lecto-escritura, en un 46%; seguido de las alteraciones en la salud mental por violencia y conflictos intrafamiliares, con un 26%; la desnutrición, con 22%; déficit auditivo, con 16%; parasitismo, con 12%; piojos, con un 12%; déficit visual, 7%; hipoglicemia y otros con 2%.
En el 13% de los niños se encontró más de dos factores de riesgo, lo cual, según los autores del estudio, sugiere que estos menores requieren una valoración detallada por un profesional, que descarte enfermedad de base, causante de los demás trastornos.
De acuerdo con los realizadores, Etapas puede ser implementado en cualquier escuela, siguiendo unos sencillos pasos. Inicialmente, con el apoyo de los servicios de salud, se debe capacitar a los maestros sobre los problemas que pueden afectar el aprendizaje de los escolares.
En segundo lugar, diligenciar el instrumento Etapas, mediante el cual el maestro decidirá el manejo de cada escolar, es decir, si debe remitirlo a un profesional de salud o si debe trabajar con los padres y el escolar en aquellas áreas identificadas como de mayor riesgo.
Se recomienda, en tercer lugar, el control y seguimiento de Etapas, para dar continuidad a las acciones, mediante jornadas de tamizaje y clasificación de los escolares en riesgo. Luego, hacer que la escuela se articule con los servicios de salud, a través de jornadas educativas y capacitación a los funcionarios de dichas instituciones, para que apliquen el instrumento.
Por último, se debe hacer conexión con padres y madres de familia, para motivarlos a comprometerse con las actividades de promoción y cuidado de la salud de los menores, que se planifiquen en la escuela.
"Niños y niñas en edad escolar están inmersos en un pequeño gran mundo que es la escuela, donde deben responder a exigencias con relación a su proceso de enseñanza-aprendizaje, el cual requiere de unas condiciones mínimas, para llevarse a cabo satisfactoriamente, entre ellas, un adecuado estado de salud, explica Andrea Aguilar.
Con Etapas, se busca que los maestros, padres de familia y en general toda la comunidad escolar, reconozcan la presencia de problemas de salud en los niños, para que inicien conjuntamente la búsqueda de soluciones.
Etapas fue uno de los resultados del Proyecto "Escuela y Salud: construyendo salud desde la escuela", desarrollado por el Proyecto Una Nueva Iniciativa para la formación de profesionales de la salud, en unión con la comunidad,UNI; el Núcleo de Atención Primaria Siloé; el Núcleo Educativo Eustaquio Palacios de la comuna 20 de Cali; la Fundación Centro de Investigaciones Multidisciplinarias en Desarrollo, CIMDER y la ONG "Plan Internacional de Padrinos". (Ciencia al Día No 55).
Se espera que, con el apoyo de las entidades comprometidas, Etapas pueda ser utilizado en otras instituciones educativas urbanas y rurales y que el modelo de trabajo planteado sea adoptado por los Servicios de Salud locales y regionales.
Para mayor información acerca del tema tratado en este artículo, escríbanos a aupec@mafalda.univalle.edu.co
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