Ciencia al día


JAQUE, SI. ¿PERO... MATE?

La humanidad está preocupada porque el Deep Blue, le ganó la partida a Kasparov. La principal causa de inquietud respecto al tema es si ya entramos en la etapa en que las computadoras pueden dominar el mundo.

Foto de SUMMA

Garry Kasparov no pudo conocer las últimas partidas del "Deep blue" hasta el día del juego, pues la IBM guardó celosamente el secreto.

¿Qué sucedería si un equipo de fútbol tuviera un solo jugador y su contrincante 10, y que además el primero nunca hubiese visto jugar a sus adversarios? Es casi obvio que ganaría el segundo. Bueno, algo similar le sucedió a Kasparov en la última partida de su enfrentamiento con Deep Blue.

Deep blue, la máquina que tuvo la osadía de ganarle al mejor ajedrecista del mundo, no es un simple computador, ya que posee un diccionario donde tiene almacenadas las mejores jugadas de millones de partidas de ajedrez. Posee también una prodigiosa memoria, con un poder de procesamiento de datos inmenso que supera cualquier tipo de máquina de este estilo.

Como si esto fuera poco, está alimentada por un grupo de científicos y un equipo de asesores que conocen profundamente el juego de ajedrez; pero eso no es todo, en los últimos cinco años IBM, empresa que la diseñó, ha ido robusteciendo, mejorando y alimentando esta base de datos.

El Deep Blue está capacitado para retar cualquier estilo de jugador. La idea es que el ser humano que se atreva a enfrentar a una máquina como ésta tiene que buscar otras alternativas para confundir al computador pues de lo contrario será casi imposible ganarle.

Como el mismo Kasparov afirma, si el Deep Blue se enfrentara a un campeonato con distintos expertos en ajedrez, los cuales tienen a su vez diferentes estilos, es muy probable que alguno tenga una jugada astuta y pueda ganarle a la máquina e incluso que ésta pierda desde el primer enfrentamiento.

"Es decir que el Deep Blue reúne la mejor tecnología informática, unida a los mejores expertos en el juego", afirma Fernando Machuca, director de la Escuela de Ingeniería Eléctrica y Electrónica, de la Universidad del Valle.

Para el investigador esa fue la razón por la cual Kasparov no sintió que hubiese sido un juego limpio. Además, el jugador solicitó conocer las últimas partidas del Deep Blue, pero no tuvo acceso a esta información; es como si en un partido de fútbol uno de los equipos nunca hubiera visto jugar al contrincante.

"Kasparov tenía una desventaja adicional y estuvo jugando a la defensiva, pues se estaba enfrentado contra lo desconocido; mientras que la máquina llevaba mucho tiempo estudiando el juego de su adversario".

En este punto existe el interrogante si el computador sería capaz de ganarle a otro jugador del cual no conozca su estilo de juego.

Otro agravante contra Gary Kasparov fue que no pudo jugar de manera tradicional. Debió abandonar su estilo, pues supuso que la máquina estaba completamente entrenada para competir con sus estrategias.

Lo que Kasparov pretendía era desconcertar a la máquina con un estilo antiguo de juego, una forma como ya nadie juega ajedrez. ¿Pero puede considerarse autoprogramada una máquina con una capacidad tan grande de memoria, velocidad de procesamiento gigantesca y con todas las técnicas para jugar de manera inteligente?

El Deep Blue tiene un conjunto de reglas programadas por el hombre, una experiencia acumulada gracias a la posibilidad de almacenar partidas y todas las jugadas que realizó anteriormente, más un conjunto de normas estratégicas para deducir cómo podría plantear una buena jugada, lo que implica una inteligencia artificial casi perfecta.

En este sentido el computador es autoprogramable; pero no se debe olvidar que está limitado a la información con la cual ha sido alimentado, es decir que en el evento de que los expertos en ajedrez perfeccionen sus estrategias y no se actualice la máquina ésta podría quedar absolutamente obsoleta.

Es importante aclarar que en un enfrentamiento como el del Deep Blue con el mejor ajedrecista del mundo, el ser humano puede olvidar datos en el momento de la partida, de acuerdo con su estado emocional. También es muy problable que se canse y altere anímicamente, lo que puede desconcentrarlo y afectar su memoria en momentos decisivos del juego.

Afirmar que la inteligencia artificial se adueñará del universo es una mala intrerpretación de lo que es una computadora, pues ésta no es otra cosa que una herramienta para mejorar la productividad, es un avance tecnológico hecho para facilitarle las cosas al hombre.

Según el investigador Machuca existe mucha especulación respecto al tema, lo que sucede es que esta máquina específicamente ha sido diseñada para ganarle al campeón.

La estrategia comercial de IBM es precisamente demostrar que si es capaz de vencer al campeón mundial del juego ciencia, de la misma manera estará preparada para ser el mejor asesor en negocios.

Pero la máquina también tiene sus limitaciones, pues el hombre tiene la ventaja de la creatividad o lo que el científico denomina un chispazo. Un chispazo es la capacidad de analizar, de retener lo mejor, es como la genialidad que tiene un niño, una especie de ocurrencia en el momento y el lugar apropiado.

Pero no sólo en este aspecto la espontaneidad del ser humano puede ser su mejor recurso, pues la naturalidad, el hecho de ser auténtico, único, el poseer una esencia particular que lo identifica, aún dista mucho de la rigidez absoluta de cualquier tipo de máquina, por más capaz y sofisticada que ésta sea.

Contacto: Investigador Fernando Machuca. Universidad del Valle. Email: machuca@borabora.univalle.edu.co . Cali, Colombia


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