La larva de la mariposa Caligo ilioneus puede reducir el peso de la planta entre 26 a 56% y el contenido de azúcar de 8 a 18%, en uno a dos meses, cuando la planta se encuentra entre los tres y los nueve meses de edad.
Foto de El Tiempo Cali |
Caligo ilioneus es la mariposa que en su estado larval ataca la caña de azúcar comiéndose el follaje, entre los tres a los nueve meses de edad de la planta. |
Esa mariposa grande de color marrón que presenta un color azul entre sus alas y que usted ha visto revoloteando en su lugar de trabajo, su hogar o el campo, es una plaga permanente de las plantaciones de caña de azúcar, banano, sorgo, entre otros; la población de este insecto se ha disparado por factores ambientales aún desconocidos por los investigadores.
Caligo ilioneus, insecto que se come el follaje de la caña de azúcar, puede tener graves consecuencias sobre los tallos cosechados y sobre el contenido de azúcar, de esta plantación, sino se controla en el momento oportuno.
Esta plaga que es permanente en el cultivo de caña, como todos los organismos en la naturaleza tiene sus enemigos que la depredan y mantienen el control sobre la población. “Los huevos y larvas son atacados por parásitos pero en esta ocasión la población es tan alta que sobrepasa el control natural del insecto”, dice Luz Adriana Lastra, bióloga del Centro de Investigación de la Caña de Azúcar, Cenicaña.
En estudios realizados por Cenicaña se determinó que una desfoliación severa entre los tres y los nueve meses de edad de la caña, puede reducir el peso de la planta entre 26 a 56% y el contenido de azúcar de 8 a 18%.
Foto de Atlas El País |
Las poblaciones del insecto se han incrementado en la zona sur del área azucarera, del Valle del Río Cauca, Colombia, durante los últimos ocho meses. |
En su proceso de desarrollo las larvas mas jóvenes son de color verde, se agrupan en el revés de las hojas por espacio de 20 días, tiempo en el cual se van tornando color café claro y se van desplazando hacia la base de los tallos, donde se mimetizan con el entorno, suben en las horas de la noche por las hojas para alimentares de ellas.
De acuerdo con Cenicaña, es necesario una evaluación sobre los lotes con edad entre tres a ocho meses, para conocer la cantidad de larvas por cepa. Si el promedio es igual a cinco se debe proceder a un control.
“Dentro de los métodos de control biológico sugeridos por esta entidad está la utilización de la bacteria Bacillus turingiensis para el estado larval y la utilización de cebos envenenados para el estado adulto, con el propósito de disminuir el ciclo del insecto”, explica la bióloga.
Contacto: Bióloga Luz Adriana Lastra. Centro de Investigaciones de la Caña de Azúcar, CENICAÑA. E-mail lalastra@cenicana.org
Para mayor información acerca del tema tratado en este artículo, escríbanos a aupec@mafalda.univalle.edu.co
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