Las pruebas científicas del efecto del aceite de palma en la salud, hacen de este producto una nueva forma de alimentarse sanamente.
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Estudios demuestran que una dieta enriquecida con aceite de palma no aumenta los niveles de colesterol en la sangre, e incluso induce niveles de colesterol más bajos en el plasma. |
Ahora cuando todo el mundo habla de dietas, la idea de consumir sólo la grasa necesaria para el organismo está de moda y más cuando también se relaciona con la buena salud.
Durante años se ha estado analizando cómo la cantidad de grasa ingerida en los alimentos influye en el desarrollo de enfermedades coronarias y del cáncer. Algunos de estos experimentos incluyen los aceites de origen vegetal, por estar libres de colesterol, y entre estos el aceite de palma.
Los resultados de estudios de alimentación de seres humanos demuestran que una dieta enriquecida con aceite de palma no aumenta los niveles de colesterol en la sangre, e incluso induce niveles de colesterol más bajos en el plasma.
Los animales alimentados con una dieta enriquecida con aceite de palma han mostrado una tendencia reducida a los coágulos de sangre. “Este efecto antitrombosis puede asociarse con su capacidad parra provocar una proporción favorable entre la prostaciclina y el tromboxane, lo cual se supone que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares”, explica el médico Jairo Sánchez, de la Fundación Valle del Lili, de Colombia.
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El aceite de palma se obtiene a partir del mesocarpio del fruto, mediante procesos mecánicos y térmicos. |
“Se sabe que los ácidos grasos trans promueven una posible agregación plaquetaria y afecta las funciones cardiovasculares asi como se asocian con el aumento del riesgo de cáncer, y el aceite de palma no contiene esta clase de ácidos grasos”, explica la nutricionista Mónica Tenorio, Coordinadora del Programa de Salud y Nutrición, de Cenipalma.
De acuerdo con el
médico Carlos Enrique Vargas, del Instituto Nacional de Cancerología,
científicamente se ha probado que el aceite de palma aporta cosas
buenas. “La duda está en definir si la grasa saturada de origen
vegetal no es mala como si lo es la de origen animal”, dice.
Igualmente, la presencia
de Vitamina A y Vitamina E en el aceite de palma, hace de este producto
un elemento clave para la nutrición de las personas. Por ejemplo,
como una forma de prevenir la deficiencia de Vitamina A, a los niños
del oriente se les sumistra una cucharadita de aceite de palma, durante
dos semanas.
En Colombia
El Centro de Investigación en Palma de Aceite, CENIPALMA, además de difundir el conocimiento sobre los aspectos nutricionales del aceite de palma se interesa actualmente por investigar su incidencia en los consumidores a nivel nacional.
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El 80% de la población colombiana consume aceite de palma. El cultivo de esta planta es una garantía para los campesinos y el país. |
Isabel Cristina Garcés, Nutricionista y Dietista de CENIPALMA, realizó un estudio en la población de Cumaral, de los Llanos orientales, con miras a evaluar el estado nutricional y de salud de los consumidores de aceite de palma así como su perfil lipídico, es decir, la ilustración de colesterol y triglicéricos sanguíneos de cada individuo.
De acuerdo con esta investigación no se encontró evidencia de que el consumo habitual de aceite de palma y sus derivados incremente los niveles de lípidos en el plasma.
“De todas formas, la idea es continuar con estudios similares en otras regiones del país ampliando la muestra. Actualmente se está llevando a cabo un trabajo en la zona de Codazzi, en el Departamento del Cesar”, dice el investigador.
Dado que el 80% de
la población colombiana consume aceite de palma, los investigadores
pretenden generar espacios para el estudio y discusión en este campo,
con el fin de lograr la salud y el bienestar de las comunidades.
Contacto: Centro de Investigaciones en palma de aceite,
CENIPALMA.
E-mail: cenipalm@openway.com.co
Para mayor información acerca del tema tratado en este artículo, escríbanos a aupec@mafalda.univalle.edu.co
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